Por José Morales Brum.
Luego que el Gobierno
del Frente Amplio haya resuelto aplicar un aumento considerable de las tarifas
públicas por sobre los indicativos de inflación anual, la Unidad Popular (UP) se ha movilizado inmediatamente en rechazo a
esta medida recaudatoria. A mediados del mes de febrero, la Unidad Popular ha
realizado una concentración en Montevideo en rechazo a estas medidas,
movilización que contó con gran apoyo ciudadano. En Tacuarembó, la agrupación
local de la UP, ha realizado varias pintadas de muros que denuncian la “corrupción y el despilfarro”.
Sobre esto dialogamos
con Jorge del Pino, referente de la
Unidad Popular en nuestro departamento.
Jorge, la Unidad Popular se ha estado
movilizando a nivel nacional en contra del tarifazo ¿Por qué consideran que estos
aumentos afectan a las clases populares, a trabajadores y pasivos?
- Es muy claro que estas medidas de ajustes,
vía tarifas públicas afectan a las mayorías que dependen de salarios fijos o
jubilaciones. De por si esas mayorías ya están castigadas por los bajos
salarios y jubilaciones de hambre y antes nuevos aumentos verán resentidos sus
ingresos y su poder de compras. Es un golpe injustificado que tiene un único
propósito de recaudar plata para un Estado pelado y con graves problemas por el
despilfarro y la corrupción.
En Tacuarembó se han hecho varias pintadas de
muros, hecho que ha tenido una valoración muy positiva en la población. ¿Qué
valoración hacen de estas jornadas?
- Las jornadas de propaganda para nosotros
continúan siendo una forma muy importante y necesaria de comunicación con la
ciudadanía. Por varias razones, primero por ser una forma de aglutinarnos como
colectivo, forma conjunto; segundo, por ser la posibilidad más rápida y acorde
a los recursos que manejamos y así podemos trasmitir lo que pensamos.
¿Qué medidas plantea la UP como salida a esta
situación que agobia a los que menos tienen?
- Nosotros planteamos que hay medidas
diferentes a tomar, que este gobierno las elude y evita por falta de coraje político
y termina golpeando y castigando para abajo, a los más débiles. Las medidas son
muchas, pero como prioritarias: crear una canasta de alimentos con precios
fijos y disponible como forma de asegurar la alimentación; la eliminación del
IVA de las tarifas públicas, de los
servicios médicos, de los prestamos sociales; crear organismos de producción
estatal, como un frigorífico nacional, activar una flota pesquera , recuperar
el tren de pasajeros en todo el país; generar una fuerte inversión del estado
en logística y infraestructura, como carreteras, puentes, más escuelas,
hospitales, vivienda social, como forma de reactivar la industria y el mercado
interno. Seguro que hay que abordar más medidas en distintas aéreas, pero estas
deberían ser las prioritarias y para eso hay recursos disponibles en las
reservas y esas reservas hay que tocarlas; la deuda externa hay que
replantearla como mínimo en función de los intereses nacionales; las AFAP hay
que eliminarlas y también replantearse otro esquema tributario para que
verdaderamente pague más el que tiene más y no al revés como sucede actualmente.
¿El Frente Amplio ya no representa la
voluntad de los más necesitados?
- Eso es lo que venimos diciendo desde el primer gobierno del Frente Amplio, se transita un rumbo de continuismo neoliberal al servicio de los capitales nacionales y sobre todo de las corporaciones internacionales, que se les abre las puertas con regalos fiscales y pactos secretos que atentan contra nuestra soberanía, llevando adelante una gran depredación de nuestros recursos naturales, dejando poco y nada para el Estado. Se ha traicionado las expectativas y aspiraciones del pueblo uruguayo que han apostado por un cambio y se han encontrado sometido a más de lo mismo, con un reparto vergonzoso de planes de emergencia que duran hasta nuestros días, mientras los ricos acumulan más riqueza y poder. Este rumbo ha agrandado la brecha social que existe, cada vez hay menos ricos con mucho y cada vez más pobres con poco, una verdadera desigualdad social que estalla permanentemente con violencia e inseguridad de todo tipo. No estamos de acuerdo con todo esto, por ende nuestra decisión de separarnos del FA y mantener las banderas de los cambios cada día más necesarios en el país. Invitamos a la ciudadanía a mirar a la Unidad Popular como una herramienta política en construcción para dar la batalla por los intereses de las mayorías. Tenemos que transitar hacia una revolución política pacífica que recupere la ética, la moral y el coraje político para un proyecto nacional, soberano para los uruguayos, primero con equidad y justicia social.
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