La
celebración se realizó en la Catedral San Fructuoso con una misa presidida por
el obispo de la Diócesis Tacuarembó – Rivera, monseñor Julio César Bonino.
Catedral
de San Fructuoso. Fotos: José Morales Brum.
Viernes 3 de febrero de 2017. – Con una misa celebrada
ayer en la Catedral de San Fructuoso, la comunidad católica conmemoró el día de
la Virgen de la Candelaria, celebración que se realiza cada 2 de febrero.
De igual manera, los feligreses recordaron y celebraron
el cumpleaños número 70 de monseñor Bonino, quien lleva 26 años al frente de la
Diócesis Tacuarembó – Rivera.
La advocación mariana de la Virgen de la Candelaria o
Nuestra Señora de la Candelaria tuvo su origen en Tenerife (Islas Canarias).
Según la tradición, la Virgen se apareció en 1392 a dos aborígenes “guanches”
que pastoreaban su rebaño. Ellos al llegar a la boca de un barranco, vieron que
el ganado no avanzaba. Uno de los pastores avanzó para ver lo que pasaba y vio
en lo alto una pequeña imagen de madera de una mujer, como de un metro de alto.
En la imagen, la señora portaba una vela en la mano izquierda y cargaba a un
niño en el brazo derecho, mientras que el pequeño llevaba en sus manos un
pajarito de oro.
La Virgen de la Candelaria, patrona de Canarias, y se
venera en la Basílica de Nuestra Señora de la Candelaria en Tenerife.
Más adelante, esta devoción se extendió y llegó también a
América. En Argentina, por ejemplo, su fiesta se celebra en la localidad de
Candelaria (Misiones), tomado de las antiguas reducciones jesuíticas (capital
de los treinta pueblos guaraníes que incluía a Paraguay, Argentina y Brasil).
No hay comentarios:
Publicar un comentario